Dashuria o Cassinev?

Te acercas a ella cauteloso. La inexperiencia te forzó a alejarte.

Vuelves tus pasos hacia ella y tocas su hombro con tu mano. Ella voltea y la tomas de las manos, te pesa la mirada así que la desvías. Te armas de fuerza para dirigirle unas palabras, pero uno que otro inconveniente le impide escucharlas. Lo intentas de nuevo viéndola directamente. En respuesta te regala una sonrisa que hace aparecer la tuya. Sueltas sus manos y tomas su cintura mientras la acercas más a ti y ella pone sus brazos en tus hombros. La timidez los hace soltar una breve carcajada, pero la intensidad del momento los hace volver a la seriedad. Ni siquiera has formulado tu pregunta cuando ella te ha dicho si, asintiendo con la cabeza ligeramente. Acercas tus labios a los suyos lo más que puedes sin llegar a tocarlos, y el resto del camino se lo das a recorrer a ella. Ella reacciona y recorre el último tramo hasta el contacto.

Era un panorama inspirador y romántico.

Lástima que desearía nunca haberlo visto. Me gustaría desearte suerte de corazón, si tu eres feliz, yo también lo seré… créeme, es más difícil de lo que parece.